Islas Baleares.
Las islas mayores del archipiélago balear son Mallorca, Menorca, Ibiza, Formentera y Cabrera.
El relieve de Baleares mantiene los elementos propios del levante peninsular al que está unido por un estrecho brazo que se sumergió bajo el mar a finales del Terciario. El archipiélago balear, es por tanto, una prolongación en el mar Mediterráneo de las Cordilleras Béticas. Su origen se enmarca dentro de la orogenia alpina.
Las islas están formadas mayoritariamente por rocas de tipo calizo, por lo que en ellas es muy importante el modelado kárstico. Los ejemplos más conocidos son las cuevas del Drac en Mallorca.
Los accidentes topográficos más importantes son las sierras del Levante y la sierra de Tramuntana, que alcanza 1.445 m de altura en el Puig Major, en Mallorca. En general el resto de las islas están formadas por un relieve bajo y llano. La llanura más extensa es el Pla, en el interior de Mallorca, que es también la región más fértil.
En Ibiza podemos encontrar la altura máxima en el Sa Talaia